Overblog
Edit post Seguir este blog Administration + Create my blog
13 febrero 2012 1 13 /02 /febrero /2012 09:52

 Celestino González Herreros

 

SIGUIENDO LAS HUELLAS DE OTROS PASOS

 

 

1 Celestino González HerrerosUna enorme y bellísima aguililla, con su armonioso vuelo, proyectaba sombras grises que se movían sigilosamente sobre los alineados viñedos, celosamente cuidados y prietos de brillantes y pulposas  uvas en sus alargados racimos de boyante espesura y en cuyas resistentes vayas pendían exuberantes como queriendo descolgarse... Los virajes en el transparente aire que hiciera el rapaz animal en su artístico planear, yo los seguía con la mirada somnolienta por el cansancio, dejando escapar las sombras que me llegaban y que se escurrían sobre la verde alfombra vegetal.

 

Siguiendo por el camino, alcancé a ver al otro lado del mismo, los bordes del barranco contiguo que se abrían a medida que me acercaba a su profundo abismo de sinuosas pendientes en sus bellísimos márgenes, siendo escurridizos los pronunciados declives hasta llegar abajo, a la pedregosa y sombría oquedad de su oculto suelo. Tiré una piedra al vacío, como queriendo medir la distancia y sólo alcancé su lejanía a través de un espontáneo silbo que hice para buscar su perdido eco, y esperé hasta quedar satisfecha mi curiosidad, cuando rompió el silencio de tan atractivo y oculto lugar.

 

En la bifurcación del terreno, tuve ocasión de preguntarle a un campesino que se cruzaba conmigo, si quedaba mucho y cuál era la ruta indicada para llegar al pueblo más cercano. Informado debidamente, seguí adelante por la vertiente de la derecha y a tan sólo unos minutos más, comencé avizorar las lejanas siluetas de las primeras casas que surgían entre la gigantesca arboleda y la abundancia de la abrupta maleza. En el mismo trayecto, un mozo de mediana edad y contextura fuerte, bajaba vivaz sorteando los obstáculos impertinentes del inhóspito y árido tramo de ese corto trayecto, el cual, llevaba consigo un par de hermosas vacas y allá venían dos vecinos más, acompañados de un corpulento perro, que resultó ser, un precioso ejemplar presa canario de tentadora belleza y elegancia indescriptible. Uno de ellos, deteniendo su marcha, se me acercó y me pidió si tenía con qué encender un cigarrillo, y en la parada obligada hablamos algo, sin que fuera nada concreto, simplemente monólogos y el correspondiente saludo. Al llegar al pueblo, lo primero que pregunté fue, si había otro sendero para no regresar por el mismo que me llevó hasta allí... Efectivamente, así era, ello me brindaba la satisfacción de ver más y disfrutar del paseo subsiguiente, después de que hablara con alguien del pueblo y viera algo de nuevo interés.

 

A lo lejos resplandecían las lejanas montañas, envueltas en algunas nubes dispersas que alegraban el panorama campestre. En el pequeño poblado, las calles estaban desiertas y en su única plaza, el ambiente balsámico y soberbiamente pasmoso, daba a su vez cierta sensación de paz, hasta el punto de agradar sobremanera, después del largo camino, por lo que opté por sentarme en el próximo banco de piedra que hallé, y que, como todos los demás, estaba libre y esperé a reponer las energías gastadas en el incesante caminar desde las primeras horas de la fresca y prometedora mañana. Luego fui en busca del calor de las gentes que aún no asomaban de sus disimulados escondrijos, en previsión instintiva propia de los lugares apartados. Y así, fueron apareciendo, no sin sigilo, obsequiándome, primero sus sonrisas, más tarde, los acostumbrados saludos y como nota simpática, algunos perros que salieron a mi encuentro ladrándome desaforadamente; y el clásico niñito que se me queda mirando con expresión interrogante... ¡Qué diáfano y limpio estaba el cielo ese día!..¡Y que dulzura al alma daba tanta paz en un paraje como ese!

 

Hasta mí se acercaron dos personas mayores, que, reverentemente se libraron de sus respectivos sombreros de tela negra, y se me brindaron para lo que yo mande -así dijeron- invitándome, si quería ir a sus casas y conocer, sin reservas, las cosas del pueblo y sus costumbres rurales. Aquello me gustó mucho, ya dentro de la vivienda de uno de ellos y después de saludar a toda su encantadora familia, veo llegar a una muchacha joven, con, en una mano, una botella de vino y en la otra un queso blanco casero que olía a eso, al verdadero queso. Y así aparecieron los vasos y sin darnos cuenta, mientras hablábamos, acabamos con la botella; entre tanto. Ya me sentía uno más entre ellos y dijimos de salir, para conocer cosas de la calle, la iglesia, al manda más del pueblo, en fin, familiarizarnos. Fueron tres horas y media de camino, sin hablar con nadie, que al llegar a esto todo cambia y el espíritu de uno se siente de otra forma, más animado, seguro que sí.

 

El cura, como es natural, se apuntó al almuerzo que, entre un pequeño grupo de "nuevos amigos" improvisamos: Sacrificaron unos conejos y los arreglaron para degustarlos a la brasa, con mojo y papas guisadas, y una bimba de gofio amasado con almendras y miel de palma. Frutas había de todas las que da el campo y el vino, no digamos nada, caldo de dioses... Después de la comida, unos viejos trajeron sus guitarras y aquello fue "pa" qué les cuento. Luego el envite con la baraja, más vino, que al final tuvieron que llevarme en una bestia media arisca la condenada, hasta el final del camino y allí tomé la guagua...

Compartir este post
Repost0

Comentarios

DIARIO DEL VALLE - LOGO

LOGO DE FOTOS

DATOS PERSONALES

      PERAZA

   

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

   

José Peraza Hernández,

Investigador y escritor.

    

José Peraza Hernández nació en Los Realejos (Tenerife) en 1953, villa donde transcurrió su infancia. Se formó en un centro educativo de su pueblo, a pesar de que los tiempos nunca le fueron favorables.  

Intentó realizar su sueño: escribir. Recuerda el nombre de su centro de enseñanza con mucho cariño, "Colegio San Sebastián", junto a la plaza que lleva el mismo nombre. De esa época podría citar a los siguientes profesores: Don Domingo Luis Estrada, Don Esteban, Don Manuel Espinosa García, Don Mario Hernández Siverio, Don Máximo Padrón Morales (San Juan de La Rambla), Don Francisco Hernández y Hernández (conocido por Inocente) Don José Javier López Garisoain (conocido por Pepe), y un largo etcétera. Se considera amante de la historia, del pueblo y de las cosas en general.  

En 1975 se afincó en el lugar llamado Casa Azul, del barrio de La Vera, situado en el Puerto de la Cruz, aquí lleva media vida y se arraiga. Al transcurrir de los años, en 1988, decidió trasladarse de domicilio y es ahí donde permanece viviendo en la actualidad, Urbanización Casa Azul, calle Tabaiba 5, en el mismo barrio de La Vera, pero esta vez, en el término municipal de la Villa de La Orotava.  

En 1997 es miembro fundador de la Asociación de Vecinos "La Candelaria del Norte". Inicialmente actúa como colaborador; en 1999 realiza la labor de secretario hasta el año 2003. Posteriormente es nombrado presidente de la misma, cargo que lleva hasta los días de hoy. También es miembro y fundador, donde ejerce y realiza la función de Secretario de la Federación Portuense de Asociaciones de Vecinos desde comienzos en 2005, así como miembro del Centro de Desarrollo "Plan Integral del Barrio de La Vera", del Puerto de la Cruz.  

Por último realiza la función de secretario y otras labores en la Asociación Tinerfeña Peña "Mencey del Valle" del Club Deportivo Tenerife.  

Fue colaborador del Periódico "EL DÍA", en la columna de los sábados, sobre la Heráldica, con el fin de que cada persona conozca su historia y su escudo; de igual forma ha escrito artículos en dicho rotativo, secciones Balcón del Norte, Buzón Tinerfeño, LA PRENSA DE EL DIA, y otros, además del también matutino "Diario de Avisos", La Opinión, además colaboró en la Revista "Realejeros". Ha colaborado con algunas cadenas de radio sobre temas relacionados con el barrio.  

Otra de sus aficiones es ojear los archivos, libros, fotografías y la Heráldica. También colabora como Presentador de la Televisión "Mega TV- Canal 64" en varios temas como entrevistas, noticias y reportajes. Desde 2006 tiene su propio Periódico Digital que lleva por nombre "LA VERA PASO A PASO, DIARIO DEL VALLE" donde aprovecha para darle la bienvenida. A este diario de información, notas donde se hace constar aquellas informaciones, curiosidades y relatos sobre este populoso barrio enclavado en el corazón del Valle de La Orotava. Por estas páginas discurrirán el ayer y el hoy de La Vera. Sin duda, es todo un reto mantener una bitácora como ésta en la que siempre despierte el interés de los lectores en la red, por ello me permito contar con su apoyo y les invito a colaborar. Me cabe el honor de haber nacido en Los Realejos, hincar mis raíces en el Puerto de la Cruz y establecerme en el corazón del Valle. Con estas premisas presento en sociedad esta modesta contribución a difundir los valores de la  sociedad tinerfeña y realejera en particular.  

Aparte quiero agradecer enormemente a todos y a todas y cada uno/a de los colaboradores, así como a todos los Gabinetes de Prensa de cada Ayuntamiento de Taoro a Teno. Como a varios colaboradores /as, de diferentes Países. A todos mil gracias de todo corazón.  

Escribió su primer libro, bajo el título "Memorias del Pasado y Presente, Capillas, Cruces e Historia del barrio de La Vera 1999 – 2004", con referencia al Puerto de la Cruz, La Orotava y Los Realejos. El segundo libro llevó por título "Los Caseríos del Barrio de La Vera, Las Arenas 1820 – 2005, de la Villa de La Orotava". También existe un tercero "Historia de Los Nidos y la Cruz de San Luis, con su XXV Aniversario", y un cuarto con el título "Desde el Ramal hasta el Polígono San Jerónimo", los que están a punto de ver la luz, así como otros, proyectos en marcha y a punto de finalizar. Aparte de este ejemplar como bien saben que llevan por títulos Nacimiento del Apodo e Historia. Su deseo, y principal preocupación es que al llegar a sus manos este modesto libro lo sepan valorar, pues está escrito con mucho cariño y amor, de una forma sencilla, tratando así de llegar a la mayoría.  

Quiero expresar mi más profundo agradecimiento a cuantos de forma directa o indirecta han incidido en su contenido y disculparme, si con este trabajo pudiera ofender involuntariamente a alguien. Lo mismo, digo con estás líneas de este blog.  

PRIMER PREGÓN:

El que suscribe, José Peraza, el sábado 3 de septiembre de 2011. En XIV - Semana Cultural, y la X - Aniversario de la Ermita y la Cruz de la Candelaria del Norte, en la Asociación de Vecinos, la que lleva el mismo nombre en La Vera, del Sector orotavense.

*** *** ***

También quiero hacer constar mi más profundo agradecimiento al Excmo. Ayuntamiento de la Villa de Los Realejos, a don Manuel Domínguez González, alcalde de nuestro municipio, como asimismo al concejal de Cultura don Adolfo González y Pérez Siverio y de la misma forma, a don Salvador García Llanos autor del prologo de este nuevo libro.

Agradecer profundamente la oportunidad que me ofreció mi estimado amigo Esteban Domínguez, a participar en este su quinto trabajo literario sobre nuestra entrañable villa realejera, como asimismo a todos cuantos se han unido a este proyecto, el cual dejamos en sus manos con nuestro mayor cariño y afecto para su disfrute.  

Hasta siempre, esperando que cada una de estas líneas, alimente nuestras conciencias y esperemos vernos en próximas ediciones, con el mejor afán, ya que las letras forman parte elemental de nuestra cultura y van muy unidas.

 

Gracias a todos de corazón.

ESCUDOS DE LA FAMILIA PERAZA Y ALONSO

Escudo1 copiaEscudo4 copia